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NoticiasTranscripción
00:00Debajo de un puente, a las afueras de la Ciudad de México, la familia Ramírez ha
00:09montado un gimnasio de boxeo. Miguel entrenó a peleadores en centros de rehabilitación después
00:15de que su hijo tuviera problemas de adicciones. Y desde hace 10 años, este puente se ha llenado
00:21de vida. Se me presentó venirme aquí abajo del puente, que era un basurero. Los mecánicos de
00:28este lado todos con grasa, con carros, basura, adictos allá atrás, pues de todo, de todo,
00:36de todo. Escombramos, empecé con unos costalitos y mira, bendito Dios, tenemos aquí pues ya un
00:46gran prospecto en cuestión de deportes, ¿no? El suburbio de Ecatepec es más conocido por
00:55los feminicidios y la inseguridad. Por eso, a través de la disciplina y los golpes de costal,
01:01intentan que las decenas de niños y adolescentes que aquí llegan no caigan en las drogas ni engrosen
01:06las filas de la delincuencia. De ellos vienen, se cansan, no te dan ganas después de un entrenamiento
01:15de boxeo, no te dan ganas ni de ser agresivo, ni de rezongar, ni de esto. Te dan ganas o de comer,
01:21o de dormir, o de hacer ya, yo creo que los niños cansados su tarea.
01:25Una tarea en la que está implicada toda la familia.
01:28Esto es mi vida, me encanta ponerle atención a los chavos, enseñarles lo que yo sé,
01:36todo eso, todo eso me gusta demasiado.
01:40Mientras esperan el reconocimiento y apoyo de las autoridades,
01:44los Ramírez piensan seguir bajo el puente construyendo a los campeones del futuro.